8 enero, 2014

Ya ha comenzado el año 2014, y muchos lo miramos con la esperanza puesta en que este año sea más solidario que el 2013; algunos hablan de “brotes verdes”, yo prefiero hablar de la necesidad de mirar por el bien común atentos a aquellas personas de la sociedad que más necesidades tienen…

 

Y como todo comienzo, es momento de promesas y retos que asumimos con renovada energía. Os propongo, que entre vuestros retos también esté el del promover el voluntariado. No podría ser otra la indicación desde este blog, no?.  

 

La edad no debería ser un impedimento cuando se trata de hablar sobre participación, acompañamiento, altruismo, empatía, reducción de la desigualdad. a estas alturas no cabe duda que el trabajo en los centros escolares de todas aquellas personas involucradas en la educación infantil y juvenil promoviendo estos valores y competencias que tendrán como resultado, un impacto muy muy muy positivo en la sociedad.

 

Promover acciones de voluntariado en el contexto del aula no sólo mejora la convivencia en la clase -en esa relación alumnado/profesorado o alumnado/alumnado-. Al mismo tiempo el compromiso solidario reduce conflictos, entre otras cosas porque aumenta la autoestimaSe ha demostrado que si desde niños se les enseña a compartir y ayudarse unos a otros mejora su autoestima, el comportamiento y, como no, el rendimiento académico.

 

En esta línea traigo hoy una herramienta didáctica diseñada para acercar el voluntariado a las aulas y promover los valores solidarios desde la infancia y la adolescencia. Ha sido editada por la Plataforma del Voluntariado de España . Es una herramienta pensada para los docentes para que trabajen en clase los valores que laten detrás del voluntariado. Esta unidad didáctica, que contempla el ciclo educativo obligatorio (infantil hasta secundaria), pretende fomentar desde la infancia la participación en el mundo que nos rodea, así como el compromiso con las causas y personas más vulnerables. Os animo a trabajarla…, las unidades son claras y fáciles de poner en marcha. Detrás de todo el trabajo late la idea de que son los peques los que se deben sentir parte activa “agentes generadores de cambio”. 

 

Este tipo de guías sitúa con claridad que, por ejemplo, ejercitar la buena vecindad está muy bien, pero no es una acción propiamente de voluntariado. Hablar de voluntariado supone hablar de proyecto, trabajo conjunto, planificación, bien común…

 

Si os animáis el documento se puede descargar aquí