12 mayo, 2013

La Navidad es una buena época para que las organizaciones hagan campañas solidarias y así consigan que la gente haga sus aportaciones y se pueda atender a personas necesitadas en todo el mundo. En las escuelas aprovechamos estas fechas para sensibilizar a los alumnos de las distintas realidades que existen y hacer recogidas de alimentos, juguetes y otros objetos. En este post, nos centraremos en las distintas campañas que Ull, Canvi i Acció ha hecho a lo largo de estos 6 años del proyecto. 

Con nuestras visitas a los distintos países de origen de nuestros alumnos, uno se conciencia de la necesidad de participar de alguna forma u otra en conseguir recursos para aquellas familias que más lo necesitan. A lo largo de nuestra trayectoria hemos hecho dos campañas; una, en la que  la recogida fue antes de irnos de viaje y otra, en la que la iniciativa salió de los propios estudiantes a la vuelta del proyecto.

Si bien recordáis por lo que hemos escrito en otros posts, Cuba fue nuestra cuarta edición del proyecto y con ello empezamos nuestra primera campaña. Preparando nuestro viaje salió la necesidad de hacer una campaña de recogida de medicamentos. Sabemos que hay enfermedades que se pueden evitar con vacunas, antibióticos, suplementos nutritivos, etc. Por esto, en aquella ocasión, mientras preparábamos el viaje, alumnos y profesores contactamos con farmacias para conseguir gratuitamente medicamentos. En la mayoría de casos, no fue un gran problema ya que eran medicamentos que caducaban al cabo de pocos días o que aquí ya no se utilizaban. Nos fuimos con maletas bien cargadas que al llegar  a Cuba repartimos de la mejor forma que supimos. Dejamos unos cuantos medicamentos a la familia de Liliana y Lisbet, otros a los familiares de Gabriel quien se mostraron muy contentos con lo que traíamos. Finalmente, nos dirigimos a dispensarios  de las ciudades que visitamos y acabamos de repartir lo que nos quedaba. 

Nuestra segunda campaña fue para Gambia, pero el planteamiento fue distinto. En nuestra sexta edición del Proyecto visitamos Chamoi, un pueblo de Gambia donde viven los familiares de Fatu. Antes de ir, nos pusimos en contacto con la Organización Besalú Solidari que recauda dinero de distintas formas para poder ayudar al pueblo de Chamoi a tener agua, medicamentos y una escuela para los niños. 

La Organización nos pidió que llevásemos medicamentos para el ambulatorio que han montado allí. También nos dijo que en nuestra visita a la familia, podíamos aprovechar para conocer la escuela y dormir en ella. Y así fue. Después de unas cuantas horas en furgoneta, llegamos al pueblo de Chamoi y allí nos esperaban cientos de alumnos que iban a la escuela. Nos recibieron con unos papeles pintados de colores y unas canciones típicas del país. Nos instalamos en una de sus aulas para poder pasar las siguientes dos días. Fue durante nuestra estancia donde pudimos observar que en la escuela les faltaba mucho material. Los niños escribían con unas pizarras pequeñas y con una tiza para poder borrar y así no consumir material. En las clases, los niños compartían los libros. Los papeles eran escasos y el material audiovisual inexistente.   

A partir de la convivencia de nuestros días allí, a la vuelta, los alumnos del proyecto nos pidieron si podíamos hacer una recogida de material escolar. A nosotros nos pareció una gran idea y les dejamos nuestros ordenadores y despachos para que se organizaran. Alrededor de diciembre, los alumnos pasaron por todas las aulas del instituto para explicarles un poco lo que habían visto y la necesidad que tenían para hacer algo. Por eso, les pidieron que trajeran todo el material escolar que tuvieran en casa y no utilizaran o material nuevo. Les citaron un día a la hora de tutoría y en cada clase alumnos y profesores se levantaban para hacer su aportación: bolígrafos, bloques de notas, estuches nuevos y viejos, paquetes de folios, maletas, lápices de colores, libros en inglés, etc. 

La campaña de recogida de material escolar fue muy positiva. Profesores y alumnos del instituto respondieron muy bien a la iniciativa y se recogió mucho material. Los alumnos que formaban parte del proyecto lo organizaron en cajas y lo llevaron a la Organización Besalú Solidari quien envía material y medicamentos a Chamoi con un contenedor. 

Una vez más, vemos como la educación traspasa las fronteras de la escuela. Actividades como estas hacen que nuestros alumnos se muestren más comprometidos en la sociedad que vivimos. El hecho de ver y tomar consciencia de la realidad les hizo actuar de una forma. Y precisamente valoramos positivamente esta actitud y su papel de emprendedores sociales.